Seis ideas para transmitir el interés por el emprendimiento a través de generaciones
Un refrán popular dice: “Padre zapatero, hijo caballero, nieto remendón”. Este dicho ilustra lo que, en algunos casos, puede suceder a lo largo de las generaciones con algunas empresas familiares: muchas de ellas no logran mantenerse en manos de la familia pues fallan ante la dificultad de gestionar la complejidad que viene con el paso de generación en generacion. Sin embargo, muchas empresas alrededor del mundo logran romper con este paradigma a través de mantener el espiritu emprendedor de sus fundadores. ¿Cómo lo hacen?
Las seis claves
1. Modelar comportamientos
¡A los jóvenes les encanta divertirse! Cuando ellos ven que sus padres reflejan un verdadero gusto por su actividad profesional, empiezan a formar una relación con el trabajo acorde. El entusiasmo de los modelos familiares a seguir transmite cómo el trabajo significativo y con un propósito puede ser no solo un camino viable, sino un camino agradable hacia la autorrealización.
2. Transmitir una narrativa familiar honesta
Cada familia tiene una narrativa propia. El psicólogo Marshall Duke habla de las narrativas ascendentes, en las que los éxitos de cada generación parecen ser cada vez más grandes que los de las generaciones anteriores; de las narrativas descendentes, en las que la gloria del pasado parece ser un estándar al que ya no se puede volver a llegar; y de una una tercera narrativa que produce un sentido más constructivo y más completo de pertenencia: la narrativa oscilante. En ésta última, se sigue la historia de la familia a través de sus puntos altos, medios y bajos. Este enfoque, más honesto y realista, elimina la presión sobre las generaciones más jóvenes y las motiva a contribuir al crecimiento de la empresa familiar, inspirados por lo que pueden lograr pero sin el temor de fracasar.
3. Fomentar la curiosidad
¿Cómo se hace para fomentar la curiosidad en los más jóvenes? ¡Con preguntas! Haciendo preguntas a sus hijos, muchos empresarios exitosos logran estimular el hábito de cuestionar cómo funcionan las empresas; estos cuestionamientos los llevan a reflexionar y a sugerir ideas para crear cosas nuevas o para solucionar problemas. Este hábito servirá para nutrir los impulsos emprendedores de los jóvenes, y los guiará para comprender la viabilidad: cómo las ideas de negocios se traducen finalmente en empresas tangibles.
4. Perseverar juntos como familia
El emprendimieneto exitoso requiere resiliencia, disciplina, y a veces décadas de paciencia y gratificación retrasada. Lo que distingue a las familias que lo hacen exitosamente es que enfrentan estos retos unidos como familia. Esto se logra creando un ambiente que simultáneamente celebra y contextualiza adecuadamente el trabajo duro y la dedicación. Por ejemplo, padres que comparten con sus hijos los desafíos que tienen en la empresa e integran esos temas en la conversación familiar cotidiana, con inclusión, cooperación y curiosidad.
5. Transmitir escasez en un contexto de abundancia
Las familias que impulsan eficazmente las aspiraciones empresariales de sus hijos suelen estar atentas al valor de las cosas y se aseguran de que sus hijos se conviertan en consumidores reflexivos y no den por sentado su estilo de vida. Esto equivale a un posible antídoto contra los “derechos adquiridos”. No obstante, la restricción económica de una familia puede resultar irritante para los miembros de la próxima generación, provocando sentimientos de privación relativa, incluso resentimiento, si interpretan los esfuerzos de sus mayores como un mecanismo para reprimirlos. Las familias que hacen esfuerzos genuinos para brindar alternativas reflexivas y gratificantes sobre el valor del dinero tienen más probabilidades de superar esas reacciones negativas y crear consciencia sobre el valor del dinero.
6. ¡Dar permiso para soñar!
Los niños sueñan con tener su propio negocio desde la primera infancia. La forma en la que los padres respondan a estas fantasías será fundamental para que forjen sus sueños a futuro. Las familias que estimulan el espíritu empresarial entienden que la continuidad de la empresa dependerá invariablemente de su capacidad para adaptarse, evolucionar y transformarse. Cuando las personas mayores escuchan activamente las aspiraciones de sus hijos y apoyan que se conviertan en posibilidades viables del mundo real, sus hijos a su vez sienten que sus intereses se toman en serio y que su familia está dispuesta a apoyar sus aspiraciones y elecciones.